El domingo, los cubanos realizaron inusuales protestas callejeras pacíficas en Santiago de Cuba —la segunda ciudad más grande del país— y en al menos otras cinco localidades, principalmente del oriente de la isla, para protestar por la escasez de alimentos y electricidad.
La misma jornada, la embajada de Estados Unidos en La Habana dijo en X que estaba al tanto de informes de “manifestaciones pacíficas” y pidió al Gobierno cubano que “respete los derechos humanos de los manifestantes y atienda las necesidades legítimas del pueblo cubano”
La postura estadounidense recibió el rechazo inmediato del ministro cubano de Asuntos Exteriores, Bruno Rodríguez, quien pidió a Washington que no “interfiera en los asuntos internos del país”.
Igualmente, el vicecanciller cubano, Carlos Fernández de Cossío, trasladó el lunes formalmente “el firme rechazo” de La Habana a la conducta injerencista y los mensajes calumniosos del Gobierno estadounidense y su embajada en Cuba ante asuntos internos de la realidad cubana, indicó el Ministerio de Asuntos Exteriores de Cuba en un comunicado.
Según la nota, la parte cubana llamó la atención sobre “la responsabilidad directa del Gobierno de Estados Unidos en la difícil situación económica por la que atraviesa Cuba en estos momentos y, en específico, ante las carencias y dificultades que enfrenta la población de manera cotidiana, con la depresión e insuficiencia de abastecimientos, bajo el peso e impacto del bloqueo económico diseñado para destruir la capacidad económica del país” caribeño.
Gobierno de EEUU debe respetar los estándares mínimos de decencia y honestidad que se esperan de una misión diplomática.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) March 18, 2024
Si a EEUU le preocupara bienestar del pueblo cubano levantaría #BloqueoGenocida y sacaría a Cuba de lista de supuestos patrocinadores del terrorismo. https://t.co/Es3Za4jt63
Cuba, que lucha contra su peor crisis económica en décadas y exacerbada por las sanciones de Estados Unidos, ha estado experimentando apagones desde principios de marzo por motivos de mantenimiento en la planta termoeléctrica Antonio Guiteras, la más grande de la isla.
La situación empeoró durante el fin de semana debido a la escasez de combustible necesario para generar electricidad, y algunas zonas se quedaron sin electricidad hasta 14 horas al día.
En este contexto, la declaración cubana pone de relieve que, si Estados Unidos tuviera una “preocupación genuina por el bienestar del pueblo cubano”, eliminaría Cuba de la lista arbitraria de países que, según dice, patrocinan el terrorismo, que se agregó en 2021.
Estados Unidos mantiene un embargo económico contra la isla desde hace más de seis décadas, reforzado en los últimos años, primero bajo el mandato de Donald Trump (2017-2021) y continuado por su sucesor Joe Biden.
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