Así, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó por 25 años consecutivos el bloqueo a Cuba. Pero esta vez, sin ningún voto en contra.
Estados Unidos, que impuso el embargo en 1962, se abstuvo de votar en contra al igual que su aliado Israel. La Habana saludó la medida, pero denunció que el bloqueo persiste e insistió a Washington a dar pasos prácticos.
Los ciudadanos cubanos también llamaron a EE.UU. a ir más allá de las palabras. Mostraron un poco de pesimismo ya que el Congreso estadounidense, dominado por los republicanos, se resiste al levantamiento del bloqueo. Otros ciudadanos criticaron a Washington por haber violado los derechos humanos en Cuba durante más de cinco décadas.
La abstención de Estados Unidos durante la votación en la ONU se produjo después de que este país y Cuba acordaran en 2014 restablecer los lazos. Desde entonces, la isla ha dejado claro en varias ocasiones que sin el levantamiento del embargo, la normalización de las relaciones no será posible.
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