En una carta publicada este domingo en su cuenta en la red social Facebook, De Vido –quien se encuentra en la cárcel Marcos Paz– ha hecho referencia al caso del exsenador Emilio Cantarero –acusado en una trama de sobornos–, asegurando que el peronista fue “un chivo expiatorio”.
En su carta, titulada “De la Banelco y otras yerbas”, el exministro argentino advirtió al presidente del Partido Justicialista, José Luis Gioja, que “no está, mientras siga con vida, dispuesto a jugar en la historia el papel que tuvo el senador Cantarero”.
De Vido ha hecho referencia al caso de Cantarero, resaltando que “más allá de sus responsabilidades, fue el único expuesto”, agregando que “como se trataba de una reforma laboral comprada, todo finalmente se ocultó, tanto el hecho como principalmente sus autores”.
“Sería bueno, en estos tiempos de euforia republicana y búsqueda de la transparencia y la verdad, que la causa se reabra porque todos sabemos lo que pasó. Lo que nunca se supo a través de las conclusiones de la justicia, hablando mal y pronto, es quiénes y cuánto se llevaron”, ha criticado.
Sería bueno, en estos tiempos de euforia republicana y búsqueda de la transparencia y la verdad, que la causa se reabra porque todos sabemos lo que pasó. Lo que nunca se supo a través de las conclusiones de la justicia, hablando mal y pronto, es quiénes y cuánto se llevaron”, ha criticado el exministro argentino del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
De Vido fue detenido el 25 de octubre, inmediatamente después de que la Cámara de Diputados votara a favor de despojarle del fuero parlamentario, atendiendo así la petición de la Cámara Federal, que espera juzgarle por cargos de corrupción.
El antiguo titular de Planificación está acusado de malversar el dinero que entre 2005 a 2015 se destinó a Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) para la modernización del complejo minero de Río Turbio, en la provincia de Santa Cruz.
Julio de Vido, se ha convertido en el último miembro del círculo de la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, en caer en desgracia.
Ya lo hizo el exvicepresidente Amado Boudou, sobre el que pesan varios cargos, y Fernández de Kirchner quien tiene que hacer frente a denuncias por corrupción y abuso de poder, acusación rechazada por ella.
De acuerdo con la expresidenta argentina la democracia en el país sudamericano está en peligro y “el gobierno del presidente Mauricio Macri está utilizando el Poder Judicial para perseguir a los dirigentes opositores. El objetivo de esta persecución judicial es precisamente atemorizar a los dirigentes de la oposición para que sean sumisos ante la segunda fase del ajuste que se busca implementar”.
snz/ktg/tas
