El histórico acuerdo marco de negociaciones entre Irán y el Sexteto (EE. UU., el Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania) ha provocado reacciones de alivio y satisfacción entre la población y activismo estadounidenses.
Sin embargo, legisladores republicanos que se oponen a cualquier tipo de acuerdo, han adelantado que buscarán que el Congreso tenga un rol determinante sobre el acuerdo final.
El Congreso se encuentra en receso hasta el 13 de abril, ello no impidió que voces discordantes emitieran sus críticas al acuerdo.
Republicanos radicales, quienes se han alineado a una feroz oposición al acuerdo nuclear con Irán, sin ofrecer otras alternativas a la diplomacia, están ahora enfocados en promover una legislación que le daría al Congreso el poder de aceptar o rechazar un acuerdo final.
La pregunta ya no es, si es posible llegar a un acuerdo con Irán, sino, hasta qué punto el presidente Barack Obama podrá contener al ala extrema de su país, que busca evitar que se llegue a dicho acuerdo.
Alfredo Miranda, Washington.
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