Así responde el Ejecutivo de Mariano Rajoy, después de seis meses, al partido independentista ERC que preguntó sobre el control que ejerce el Gobierno central a las armas que vende a Arabia Saudí y otros países de Oriente Medio.
Varios de esos bombardeos destruyeron o dañaron infraestructura civil en lo que parecen haber sido ataques indiscriminados, que violan el derecho internacional humanitario. Al parecer, todas las partes del conflicto han cometido graves abusos y violaciones de derechos humanos", señala el diputado español Joan Tardá.
El pasado febrero, el diputado de ERC Joan Tardá pidió en el Congreso explicaciones al Gobierno de Rajoy a raíz de un informe de Amnistía Internacional en el que afirma que Riad violaba los derechos humanos y sus bombardeos han causado víctimas civiles, casi 100 muertos, como parte de la coalición de países que Arabia Saudí encabeza contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
"Varios de esos bombardeos destruyeron o dañaron infraestructura civil en lo que parecen haber sido ataques indiscriminados, que violan el derecho internacional humanitario. Al parecer, todas las partes del conflicto han cometido graves abusos y violaciones de derechos humanos", señala el diputado español, respecto a Arabia Saudí, un reino árabe conocido por sus restricciones a las libertades que también ha tenido un papel clave en la sangrienta represión de las protestas populares del vecino Baréin.
El Ministerio de Defensa español, en su respuesta, indica que en todas las transacciones se cumple con minuciosidad las normas internacionales que rigen el control de las exportaciones de material militar, “muy especialmente”, los criterios de respeto a los derechos humanos, la situación interna del país, la de la región o el riesgo de desvío del armamento.
"Respecto al seguimiento de las armas exportadas, se informa de que los usuarios finales fueron organismos o empresas de naturaleza pública y las licencias estuvieron acompañadas de garantías de uso final y de estrictas cláusulas de no reexportación", reza el texto.
A la pregunta de Tardá sobre venta de carros de combate a Arabia Saudí, el Gobierno español, que entre 2003 a 2014, ha exportado armas a este país por valor de 725 millones de euros, responde que "ni ha sido presentada solicitud alguna de exportación relacionada con la misma".
Agrega que “si se tuviese conocimiento o existiese riesgo de uso indebido de los materiales exportados (…) se podría suspender o revocar una autorización concedida para vender armamento o materiales militares”.
Recuerda también que España, es uno de los países que llama al respeto de los derechos humanos y a la toma de precauciones para no dañar a la población e infraestructuras civiles (hospitales, colegios, sistemas de suministro de agua…) en su uso.
En 2014, según el informe remitido por el Gobierno al Congreso en febrero y que cita Joan Tardá, una de cada cuatro operaciones autorizadas en el primer semestre de 2014 fue destinada a Oriente Medio, por 330 millones de euros.
De 2003 a 2014, España también ha exportado armas a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) por 719 y a Egipto por 277 millones de euros.
No sólo España, EE.UU. y el Reino Unido también ven en Arabia Saudí un beneficioso mercado, pese a que Riad las usa para atacar ilegalmente a otros países, como es el caso de su vecino, Yemen.

El 26 de marzo, Arabia Saudí lanzó una ofensiva militar contra Yemen con el visto bueno de Estados Unidos y prescindiendo del permiso de las Naciones Unidas, en un intento por eliminar de la ecuación al movimiento popular Ansarolá, el único que lucha contra los grupos terroristas en Yemen, y restaurar en el poder al expresidente fugitivo, Abdu Rabu Mansur Hadi, un estrecho aliado de Riad.
Al menos 1693 civiles han perdido la vida desde que comenzó las ofensivas militares lideradas por Arabia Saudí, según el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Rupert Colville.
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