Además, de acuerdo con la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), el devastador terremoto destruyó 130.000 viviendas y causó daños a otras 85.000.
Asimismo, un gran número de monumentos históricos han quedado reducidos a la nada como consecuencia del potente seísmo que también provocó una avalancha en el monte Everest y, en esta zona, mató a al menos 17 personas.
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