Para todos los musulmanes a lo largo y ancho del mundo, el “último Profeta” enviado por Dios trajo a la humanidad un mensaje eterno e inolvidable.
Millones de creyentes en diversos países están de luto y asisten a numerosas ceremonias en los últimos días de Safar (segundo mes del año de la Hégira lunar).
En este contexto, todo el pueblo iraní ha participado este viernes en las ceremonias de duelo que se han realizado en todas las ciudades del país en homenaje al Profeta del Islam y al segundo imam de los chiíes, el Imam Hasan (la paz de Dios sea con ellos).
Un punto de encuentro masivo para conmemorar estas pérdidas es la ciudad santa de Mashad, en el noreste de Irán, donde se encuentra el mausoleo del octavo imam de los musulmanes chiíes, el Imam Reza (P), cuyo martirio se recuerda este año, el 19 de noviembre.
El Profeta Mohamad (P) nació en La Meca y falleció a los 63 años en la ciudad de Medina (ambas en Arabia Saudí) en el año 11 de la Hégira. 39 años después, en el mismo día del fallecimiento del Profeta, su venerado nieto, el Imam Hasan (P) fue hecho mártir a los 47 años de edad y enterrado en el cementerio de Al-Baqi, en Medina.
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