Así ha revelado este jueves el diario jordano 'Al-Arab Al-Youm' citando a un funcionario del Gobierno de Amán, bajo condición de anonimato, además de recalcar que la estrategia de la ofensiva contra Daesh ya está sobre la mesa del rey jordano, quien espera discutirla con las autoridades del país.
La ejecución de ese plan, de hecho, requiere entrar en el territorio sirio, y Jordania comparte su frontera del norte con Siria, indica la fuente. La decisión de Amán es ‘vengar’ la muerte del piloto jordano Maaz al-Kassasbeh, a manos de Daesh.
EIIL emitió el martes un video de 22 minutos en el que aparece supuestamente el piloto jordano vestido con un mono de color naranja encerrado en una jaula de hierro mientras se consume vivo entre las llamas.
El piloto jordano fue capturado el pasado 24 de diciembre en la provincia de Al-Raqa, en el norte de Siria, tras la caída de su jet F-16, el primer avión derribado perteneciente a la llamada coalición que lidera Estados Unidos contra el EIIL.
En esa fecha, algunos analistas internacionales trataron el tema desde diferentes puntos de vista, muchos de ellos consideraron que el caso podría ser empleado para justificar una intervención terrestre en el sur de Siria.
Jordania, uno de los principales aliados de Washington en Oriente Medio, participa en estos ataques aéreos en Siria, so pretexto de luchar contra Daesh.
Según reveló el pasado mes de junio el diario estadounidense ‘Los Ángeles Times’, desde 2012, Jordania ha ofrecido algunos centros a la Agencia de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés) para que entrene en secreto a los grupos armados que luchan para derrocar al Gobierno sirio, entre ellos el EIIL.
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