Llevando a cabo una serie de ataques masivos, los aviones de combate rusos han bombardeado varios objetivos de los terroristas en la región montañosa de Yabal al-Akrad, en la ciudad estratégica de Kabani, ubicada en el noroeste de la provincia de Latakia (oeste).
En un vídeo compartido en las redes sociales, luego del ataque, se puede ver cómo los cazas rusos golpean el bastión de la alianza terrorista, según informa el portal sirio Al-Masdar News.
Además de atacar a Kabani, las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia lanzaron una ofensiva contra la aledaña ciudad de Al-Sirmaniyah, que se encuentra al oeste de la llanura de Al-Qab y al sur de Yisr al-Shugur.
Estas acometidas aéreas marcaron la segunda vez desde el inicio del año que las Fuerzas Aeroespaciales rusas apuntaron contra Kabani y Al-Sirmaniyah. Previamente, habían realizado vuelos de reconocimiento sobre el área para preparar los ataques.
El Ejército sirio, que está ultimando sus preparativos para hacerse con el pleno control de las zonas noroccidentales del país, que todavía están dominadas por las bandas extremistas, especialmente Latakia e Idlib, ha aumentado sus ataques antiterroristas recientemente.
A finales de septiembre de 2015, Rusia, a petición de Damasco, comenzó una campaña contra los terroristas en el país árabe, dando apoyo aéreo y logístico a las fuerzas del Ejército sirio para detener el avance de las bandas ultraviolentas, así que las fuerzas sirias han logrado destruir importantes focos de las facciones terroristas del HTS y PIT, liderada por el Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham), afiliadas a Al-Qaeda, infligiendo grandes pérdidas en sus filas.
Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha dejado claro que Moscú mantendrá su presencia militar en sus bases ubicadas en Siria, a las que, según indica, enviará refuerzos, en caso de necesidad.
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