Los extremistas apoyados por Ankara continúan sus crímenes contra los civiles en las áreas donde operan y en un acto nuevo, han irrumpido en las casas de los lugareños desplazados en la localidad de Ras al-Ain, en Al-Hasaka, y se han apoderado de sus hogares.
Según ha informado este viernes la agencia oficial siria de noticias SANA, citando a fuentes civiles locales los mercenarios de las fuerzas de ocupación turcas confiscaron las casas y saquearon su contenido.
Las fuentes agregan que la incautación de viviendas iba acompañada de un sabotaje deliberado de las propiedades de las personas que hace meses fueron expulsadas de sus hogares por los ocupantes turcos y sus terroristas aliados.
El Gobierno de Siria, presidido por Bashar al-Asad, que cataloga a las fuerzas turcas de ocupantes, ve bastante negativo el papel que desempeña Ankara en este territorio, pues, las tropas turcas y los terroristas, a los que apoya, atacan con frecuencia a las tropas sirias que luchan para preservar la soberanía e integridad territorial del país árabe.
De hecho, Ankara hace caso omiso a las repetidas denuncias de Damasco al respecto; el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó a principios de este mes de octubre que su país no cesará las operaciones militares que inició en 2016 en el norte del país árabe.
Eso mientras el vicecanciller de Siria, Faisal al-Miqdad, ya había asegurado en febrero pasado que el Ejército sirio luchará hasta la plena liberación del país de extremistas takfiríes y ocupantes turcos.
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