“Tal investigación revela sus mentiras, invenciones e implicación con los grupos terroristas en el uso de esta arma para acusar al Estado sirio”, ha destacado este jueves una fuente del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores a la agencia local de noticias SANA.
De esa manera, la fuente oficial siria ha condenado la declaración emitida ayer miércoles por los ministros de Asuntos Exteriores del Reino Unido, Francia, Alemania y Estados Unidos en el aniversario del ataque a Jan Sheijun (en la provincia siria de Idlib), cuya autoría responsabilizaron a Damasco y exigieron que “rinda cuentas”.
Por su parte, Siria ha rechazado una vez más las acusaciones y ha tachado este comunicado “rencoroso” de una señal de “la campaña de desinformación y mentiras contra el Gobierno sirio”.
Tal investigación revela sus mentiras, invenciones e implicación con los grupos terroristas en el uso de esta arma para acusar al Estado sirio”, ha destacado una fuente del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores.
Tras el incidente, Damasco expresó su disposición a cooperar con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) y recibir a sus expertos tanto en Jan Sheijun como en la base aérea de Al-Shairat —atacada por Washington bajo el pretexto de estar “asociada al programa” sirio de armas químicas—, pero, ciertos países impidieron esta visita.
Además, ha denunciado que los mismos países acusantes son los que “han proporcionado todas formas de apoyo político, militar, financiero y logístico a los grupos terroristas” en el país árabe.
Las sustancias químicas, ha proseguido la fuente, que se encontraron en los escondites de los terroristas en la región de Guta Oriental demuestran los objetivos de la campaña histérica dirigida por los países hostiles para proteger a los grupos terroristas ante el avance del Ejército sirio.
Aseverando que el pueblo sirio erradicará el terrorismo y mantendrá su soberanía, la fuente ha concluido afirmando que el sistema unipolar caerá inevitablemente y se pondrá fin al “discurso de la hegemonía, la arrogancia y la represión”.
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