El informe, publicado en Military Review —diario oficial de la institución educativa militar del Centro de Fuerzas Combinadas de la Armada de EE.UU. (USACAC, por sus siglas en inglés)— se titula “¿Qué tipo de victoria tiene destinada Rusia en Siria?” y explica por qué las operaciones antiterroristas de Rusia en Siria están “acercándose a sus propios objetivos militares y políticos”.
“Una intervención exitosa podría brindarle la victoria en tres frentes: impedir el cambio de gobierno respaldado por EE.UU. en Siria, salir del aislamiento político y forzar a Washington a tratar con Rusia como un igual, y demostrar en casa que Rusia es una gran potencia en el escenario principal de la política internacional”, se lee en el texto.
Además, apostilla que los militares rusos trabajaban “bajo severas restricciones de recursos” mientras tenían que cambiar la política de países como EE.UU., Turquía y Arabia Saudí. En esta línea, añade que también presionaban a Washington para que aceptara tácticamente la presencia de Rusia, victoria de facto del presidente sirio, Bashar al-Asad, sobre los extremistas y la oposición respaldada por EE.UU.
De hecho, prosigue, la campaña en Siria ciertamente es una derrota para aquellos que se opusieron a Rusia y sus aliados, incluyendo a la República Islámica de Irán, que luchan contra los terroristas en el país árabe.
Una intervención exitosa podría brindarle la victoria en tres frentes: impedir el cambio de gobierno respaldado por EE.UU. en Siria, salir del aislamiento político y forzar a Washington a tratar con Rusia como un igual, y demostrar en casa que Rusia es una gran potencia en el escenario principal de la política internacional”, se lee en un artículo publicado en el diario estadounidense Military Review.
Military Review enfatiza que a pesar de las dudas iniciales sobre las perspectivas de Rusia, “especialmente dadas las recientes experiencias occidentales en operaciones expedicionarias en Oriente Medio”, Moscú generalmente prevaleció.
Desde el punto de vista técnico, el diario señala la alta capacidad de la Fuerza Aérea rusa y elogia el contingente aéreo radicado en la base de Hmeimim, en la provincia de Latakia (oeste de Siria).
Diplomáticamente Rusia “rompió” exitosamente el liderazgo estadounidense y el monopolio del proceso de paz de Ginebra, promoviendo los diálogos de Astaná, así como reuniones de grupos de la oposición para llegar a una posición consolidada, subraya, para después agregar que con la ayuda de Moscú, Damasco se ha fortalecido hasta el punto de que el Gobierno sirio puede presionar a la oposición para que negocie en sus propios términos.
A largo plazo, indica el rotativo, Rusia también obtuvo una victoria política, incluida una presencia militar a largo plazo en Hmeimim y Tartus (oeste de Siria), que ayudará a Moscú en su “mayor intento de convertirse en un agente de poder en Oriente Medio”.
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