"Los civiles están pagando el precio, tanto en las zonas controladas por el gobierno, como en los territorios de los rebeldes, sin que haya una respuesta internacional adecuada", estima la organización con sede en Nueva York (EE.UU.)
Los casi cuatro años de conflicto en Siria, han dejado más de 215 mil personas muertas. Además 11,5 millones de personas han sido desplazadas por el conflicto.
En áreas controladas por el gobierno a las cuales tuvieron acceso, indica el HRW, entre enero de 2012 y abril de 2014 se registraron tanto coches bomba como bombardeos.
"Además de ser indiscriminados, muchos de estos ataques parecen tener como objetivo principal sembrar el terror entre la población civil", señala el informe.
De acuerdo con el informe, algunos de los ataques investigados fueron reivindicados por el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe), por el frente Al-Nusra, la rama local de Al-Qaeda, y también por el autodenominado Ejército Libre Sirio (ELS).
Finalmente, la organización reitera su llamado a que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) remita el caso a la Corte Penal Internacional (CPI) con el fin de perseguir a los autores de las atrocidades inhumanas de los terroristas y grupos armados en Siria.
En momentos en que Siria se encuentra en una crisis sin precedentes, desde mediados de marzo de 2011, algunos países occidentales y regionales, encabezados por Estados Unidos, continúan echando más leña al fuego al conflicto, brindado diversos tipos de apoyo a los terroristas.
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