“Una vez más, instamos a las autoridades de Kiev a mostrar prudencia, a dar las instrucciones adecuadas a los milicianos para que pongan fin a la resistencia sin sentido y abandonen el territorio de la planta Azot”, declaró el martes el jefe del Centro Nacional de Gestión de la Defensa de la Federación Rusa, el general coronel Mijaíl Mizintsev.
En este marco, hizo saber que las fuerzas rusas y los combatientes de la autoproclamada república popular de Lugansk, en la región del Donbás, abrirán este miércoles un corredor humanitario a fin de evacuar a los aproximadamente 500 civiles que se encuentran en la planta de la ciudad ucraniana de Severodonetsk, ubicado al este de Ucrania.
Según detalló Mizintsev el corredor abre a las 08.00 (hora de Moscú) y se cierra doce horas después. “Se garantiza la evacuación segura de todos los civiles”, afirmó el funcionario ruso.
Esto ocurre después de que el gobernador regional de Lugansk, Serguéi Gaidai, admitiera el lunes que las tropas rusas controlan entre un 70 % y un 80 % de la ciudad.
La planta química de Azot se considera el último foco de resistencia ucraniana en esta zona del país.
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