El 21 de noviembre de 2017, el entonces comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán, el teniente general Qasem Soleimani, en una carta al Líder de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, informó de la victoria del Eje de Resistencia sobre Daesh, el grupo terrorista que, según Soleimani, fue una peligrosa conspiración creada por el sionismo y la arrogancia mundial y su objetivo final fue enfrentar a los musulmanes entre sí.
Soleimani destacó que este triunfo se debe a la Resistencia de los gobiernos de Siria e Irak, los sacrificios de Hezbolá del Líbano, e igualmente el papel del pueblo y gobierno de Irán. Mientras que denunció el papel de Occidente en apoyar en todos los sentidos a Daesh para extender su nefasto dominio en Asia Occidental.
En respuesta a la carta, el ayatolá Jamenei congratuló que la eliminación de Daesh ha sido un gran servicio no solo a los países de la región y al mundo islámico, sino también a todas las naciones y a la humanidad, y un doloroso golpe a los creadores de estos terroristas.
El golpe de Soleimani tras derrotar a Daesh fue tan duro que EE.UU. no pudo soportar la existencia de este gran líder antiterrorista y bajo el orden directo del entonces presidente estadounidense, Donald Trump, el teniente general Qasem Soleimani fue asesinado en el año 2020 en Bagdad, capital de Irak, durante un viaje diplomática a este país.
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