“Como la ‘Tormenta de Al-Aqsa’ dañó de manera irreparable los sistemas militares, de inteligencia y de seguridad del régimen sionista, la operación ‘Verdadera Promesa’, también, enfrentó serios desafíos al sistema de planificación estadounidense en la región e impuso a Estados Unidos una revisión en las estrategias de seguridad nacional”, destacó el domingo el vicecanciller iraní para Asuntos Políticos, Ali Baqeri Kani, durante la presentación de una publicación.
El alto diplomático iraní dejó en claro que la sinergia mayor y más efectiva entre todos los elementos militares, de seguridad, de inteligencia y políticos y de la diplomacia pública es una llave clave para mantener la disuasión activa.
Ha destacado que a la luz de la victoria en la operación de ‘Verdadera Promesa’, ha ampliado la agenda de política exterior de Irán en comparación con antes.
Al hacer alusión a la seriedad de Irán para ampliar sus vínculos con sus vecinos, Baqeri Kani resaltó que no perdemos ninguna oportunidad para fortalecer lazos de amistad y aumentar cooperaciones económicas con los países adyacentes.
El 1 de abril, Israel atacó la embajada iraní en Siria y mató a destacados militares del país persa. En reacción, e invocando su derecho a la legítima defensa, Irán realizó el 14 de este mes una operación masiva con drones y misiles, llamada ‘Verdadera Promesa’ contra objetivos israelíes en la Palestina ocupada.
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