En declaraciones ofrecidas este miércoles a la prensa a su llegada a Nueva Delhi, capital india, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hosein Amir Abdolahian, ha destacado que los dos países ya habían acordado elaborar una hoja de ruta para mantener una relación a largo plazo.
“Una de mis agendas principales es abordar y consultar con altos funcionarios indios, así como con mi contraparte, sobre la elaboración y finalización de esta hoja de ruta”, ha apostillado.
Amir Abdolahian ha enfatizado que las relaciones Irán-La India están en muy buenas condiciones y ha alabado el crecimiento y desarrollo de estos nexos, incluso en los campos económico y cultural, durante el actual Gobierno iraní.
El canciller de Irán, que se encuentra en Nueva Delhi por una invitación oficial de su par indio, Subrahmanyam Jaishankar, ha señalado que, en esta jornada, además de mantener conversaciones detalladas con su homólogo, se reunirá con el primer ministro y consejero de Seguridad Nacional de esta potencia emergente.
Durante su estadía, el titular iraní también sostendrá encuentros con eruditos religiosos, funcionarios y personalidades locales, así como empresarios e iraníes que viven en La India.
Su visita tiene como objetivo desarrollar las relaciones entre los dos países y realizar consultas estratégicas sobre las cooperaciones bilaterales y los acontecimientos regionales e internacionales.
Irán, junto con La India y Rusia, firmaron un acuerdo a principios del año 2000 para crear un corredor marítimo y ferroviario, posteriormente, diez países de Asia Central se unieron a este proyecto. El corredor disminuiría el tiempo de transporte entre la ciudad india de Bombay y la capital rusa, Moscú, de 40 días a aproximadamente 20 días, lo que podría desafiar la primacía del canal de Suez (vía de navegación situada en Egipto que une el mar Mediterráneo con el mar Rojo).
La primera fase del puerto internacional de Chabahar, situado en el sureste de Irán, se inauguró oficialmente en diciembre de 2017, como un puente de comunicación que une La India a Afganistán y Asia Central hasta Europa Oriental. Su capacidad de carga y descarga es de 8,5 millones de toneladas anuales, que se incrementará hasta más de 80 millones una vez se completen las cinco fases del proyecto, lo que está previsto para 2024.
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