En Teherán, las calles centrales de la ciudad albergaron a miles de personas para luego congregarse en la plaza de Azadi, es decir Libertad.
El 38 aniversario de la Revolución se convirtió otra vez en una demostración de fuerza frente a las amenazas externas. Fotos y consignas que se oponían a un lenguaje amenazante.
En Teherán, los manifestantes marcharon por las principales avenidas para llegar hasta la plaza de Azadi, donde celebraron por primera vez la victoria de la Revolución Islámica el 11 de febrero de 1979.
Portando pancartas de “Muerte a Estados Unidos”, coreaban consignas en apoyo a la Revolución Islámica y en contra del imperialismo.
Para los manifestantes, la conciencia y la unidad es la clave para resistir ante los enemigos y su objetivo es demostrarlo en esta celebración nacional.
Samaneh Kachui, Teherán.
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