Son lágrimas de una madre gazatí. Su hijo de 15 años fue asesinado por soldados israelíes mientras buscaba ayuda humanitaria en medio de la hambruna que se ha extendido en el enclave.
El Ministerio de Sanidad gazatí ha informado que durante el último día se ha confirmado el asesinato de otros 24 palestinos por ataques israelíes cuando intentaban obtener ayuda humanitaria. De esta forma, ha resaltado que al menos 2.180 palestinos han muerto y más de 16 000 han resultado heridos en este tipo de incidentes.
Siete expertos en derechos humanos de la ONU expresaron su alarma ante los informes sobre desapariciones forzadas de palestinos hambrientos que buscaban comida. Instaron a Israel a poner fin a este atroz crimen.
Y sobre el terreno, se están intensificando los bombardeos del régimen sionista. Un campamento improvisado para personas desplazadas cerca de Jan Yunis fue uno de los blancos, donde murieron una mujer y un niño. Esto después de que se registrara otro ataque contra el campo de refugiados de Bureij, que también mató a una mujer y a su hijo. Y la ciudad de Gaza, que todavía sigue siendo el epicentro de las agresiones israelíes.
Casi dos años después del genocidio en la Franja de Gaza, el gabinete israelí votó el 8 de agosto a favor del plan de ocupación de la ciudad de Gaza, lo que significa más derramamiento de sangre y desplazamiento forzoso de palestinos exhaustos y con hambre.
zmo
