“Estamos profundamente preocupados porque las leyes israelíes no definen, prohíben o penalizan adecuadamente la tortura y el tribunal superior de justicia ha permitido el uso de ‘medidas especiales de interrogatorio’ en lo que constituye una violación de la prohibición absoluta de la tortura”, ha manifestado hoy viernes el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Rupert Colville.
El diplomático se refería al caso de Samer al Arbeed, un palestino de 44 años detenido en septiembre por las fuerzas del régimen de Israel en una localidad en la ocupada Cisjordania bajo cargos del terrorismo.
El palestino está ingresado actualmente en un hospital, donde se encuentra en coma inducido y con respiración artificial, además de presentar heridas “críticas” sufridas después de su detención, incluidas varias costillas rotas y un fallo renal severo.
Estamos profundamente preocupados porque las leyes israelíes no definen, prohíben o penalizan adecuadamente la tortura y el tribunal superior de justicia ha permitido el uso de ‘medidas especiales de interrogatorio’ en lo que constituye una violación de la prohibición absoluta de la tortura”, ha manifestado el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Rupert Colville.
Ante la “gravedad de las lesiones”, el organismo ha pedido la puesta en marcha de una investigación al respecto. “Hacemos un llamamiento a Israel para revisar sus leyes, políticas y prácticas para que se alineen con la ley internacional, particularmente con la Convención contra la Tortura, y se aseguren de que todas las instancias y alegaciones sobre la tortura y los malos tratos se investiguen de manera inmediata, independiente, efectiva e imparcial”, ha insistido Colville.
El vocero de la ONU ha denunciado además que al menos otros tres ciudadanos palestinos han sido objeto de una retención en régimen de incomunicación durante un período prolongado de tiempo.
El régimen de ocupación israelí suele ser objeto de denuncias y codenas por la tortura de los presos palestinos o las detenciones arbitrarias de los palestinos, incluso niños y mujeres.
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La semana pasada, el Club de Presos Palestinos denunció que 73 prisioneros palestinos han perdida la vida a raíz de las torturas en las cárceles del régimen de Tel Aviv desde el año 1967.
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