En un acto sin precedentes y realizado por primera vez, por lo menos de manera pública, el ministro de Asuntos Exteriores de Baréin, el sheij Jalid bin Ahmed Al Jalifa, se reunió el jueves con su par israelí, Yisrael Katz, al margen de un evento en el Departamento estadounidense de Estado en Washington (capital estadounidense).
La cita constituye “una traición a Al-Quds (Jerusalén) y Palestina”, ha denunciado este viernes Sami Abu Zahri, un vocero del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina.
En un mensaje publicado en su cuenta de la red social Twitter, el destacado funcionario de HAMAS ha indicado que tales actos de traición no podrán dañar el discernimiento de los pueblos musulmanes, que rechazan la normalización de los lazos de los países árabes con el régimen de Tel Aviv.
El encuentro del canciller bareiní con Katz, ha agregado, es un nuevo indicio del carácter sionista de ciertos Estados árabes de la región.
Según han informado medios israelíes, la reunión fue coordinada por el representante especial de Estados Unidos para Irán, Brian Hook, y, como cabe esperar, fue elogiada por varios funcionarios estadounidenses, como Jason Greenblatt, el enviado especial de Washington para Oriente Medio, quien la describió como “muy amistosa” y “constructiva” para las relaciones Baréin-Israel.
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(La reunión del canciller de Baréin, el sheij Jalid bin Ahmed Al Jalifa, con su par israelí, Yisrael Katz, constituye) una traición a Al-Quds (Jerusalén) y Palestina”, ha denunciado Sami Abu Zahri, un vocero del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS).
Baréin no reconoce oficialmente a Israel, con el que tampoco mantiene nexos diplomáticos oficiales, pero existen indicios de que ambos han estado cooperando en secreto durante años.
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El canciller bareiní, en un encuentro previo con Hook, sostenido el mismo jueves, defendió la normalización de los nexos con Israel, iniciativa que genera severas condenas por parte de Palestina y muchos pueblos de la región, incluido el de Baréin.
El régimen de los Al Jalifa se ha convertido, de hecho, en un instrumento de Washington y el régimen israelí en sus planes para erradicar la causa palestina. En este sentido, el pequeño reino árabe acogió en junio pasado un foro proisraelí, impulsado por EE.UU., sobre el llamado ‘acuerdo del siglo’ que la Casa Blanca está impulsando para, supuestamente, solventar el conflicto palestino-israelí.
El foro de Baréin resultó ser un gran fiasco, pues, a pesar de que algunos países regionales y extrarregionales habían sido invitados, varios de ellos, entre los que se encuentran El Líbano, Irak, Rusia y China, lo boicotearon al rechazar la iniciativa proisraelí de EE.UU., que niega el derecho al retorno de los refugiados palestinos expulsados tras la creación del régimen israelí y ni siquiera contempla que haya un Estado palestino separado y soberano, entre otras concesiones ilegales a Israel.
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