La situación en la ocupada Cisjordania se tensa cada día más. Toda la ciudad cisjordana de Ramalá está bajo el cordón de seguridad impuesto por el ejército israelí después del asesinato de al menos dos soldados israelíes por palestinos que, según fuentes israelíes, lograron escapar. Este hecho tuvo lugar después de que el régimen de Israel asesinó a Ashraf Naalwa y Saleh Al-Barguzi, los que fueron acusados de herir a varios israelíes en duros enfrentamientos el pasado domingo.
Tras la operación, se produjo la incursión en todas las partes de la ciudad y el cierre de todos los puntos de control, lo que condujo al estallido de violentos choques entre jóvenes palestinos y el ejército israelí en las afueras del asentamiento ilegal de Beit El, localizado junto a la ciudad de Ramalá, norte de Cisjordania.
Estos acontecimientos y la tensión experimentada en los territorios palestinos en los últimos dos días, demuestran la falta de garantías de seguridad, además, de confirmar el fracaso de las medidas israelíes cuando se ponen a prueba.
Lo que ha sucedido en Ramalá en días anteriores es una prueba de que no se ha alcanzado una verdadera tregua permanente con el ocupante israelí, otro motivo más que prueba la necesidad de que la Resistencia proteja a los palestinos.
Huda Hegazi, Gaza.
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