“Garantizar la seguridad y la estabilidad sostenible en la región se consigue solo mediante la cooperación y la amistad entre los países de la zona”, aseveró Rohani en una llamada telefónica mantenida el martes con el emir de Catar, Tamim bin Hamad Al Thani.
Al respecto, el mandatario persa denunció la continuación de los ataques de Arabia Saudí a Yemen y la matanza de los yemeníes. “Desafortunadamente, (los saudíes) todavía son reacios a poner fin a sus acciones inhumanas”, lamentó.
Tras señalar que las sanciones y las presiones que ejerce EE.UU. contra Irán constituyen una violación de las normas internacionales, Rohani denunció que Washington lejos de aliviar los embargos antiraníes en medio de la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19), ha aumentado su hostilidad hacia el país persa.
En esta misma línea, prosiguió, el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ha intentado bloquear la solicitud de un préstamo de 5000 millones de dólares de Irán al Fondo Monetario Internacional (FMI) para hacer frente al brote.
“En esta situación especial, todos los países del mundo deben unirse para luchar contra el coronavirus y declarar claramente sus posiciones contra las acciones hostiles de EE.UU.”, agregó, antes de expresar a Catar la disposición de Irán a compartir su experiencia en el combate contra la COVID-19.
Por su parte, el emir catarí calificó de “crueles” las sanciones de EE.UU. contra Irán, e insistió en la necesidad de que Washington ponga fin a sus embargos, sobre todo en la situación actual de la lucha mundial contra el coronavirus.
Al Thani subrayó, además, la importancia de la cooperación mundial para evitar la propagación del virus letal, y ratificó el interés de Doha de estrechar sus relaciones comerciales y económicas con Teherán.
fmk/rha/shz/hnb
