Una ola de protestas contra el Gobierno amenaza con paralizar Haití. Cientos de personas llenaron las calles de Puerto Príncipe (capital) para exigir la destitución del presidente, que goza del respaldo de Estados Unidos.
Asimismo, pidieron llevar a la justicia a los malversadores de los fondos de Petrocaribe. La policía armada con equipamiento antidisturbios trató de dispersar a las multitudes que marchaban en las calles de la capital. Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), al menos 26 personas han muerto y 77 han resultado heridas en tres semanas de protestas y violencia.
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