Víctimas de abusos sexuales, que se cubren el rostro para ocultar su identidad, celebran que el tribunal en la Ciudad de Guatemala (capital) hallara culpables a dos exmilitares que mantuvieron a 11 mujeres indígenas como esclavas sexuales durante la guerra civil guatemalteca (1960-1996), 26 de febrero de 2016.
El teniente coronel retirado Esteelmer Francisco Reyes Girón fue condenado a 120 años de prisión y Heriberto Valdez Asij, un paramilitar al servicio del Ejército, a 240 años. Las víctimas declararon haber sufrido abuso sexual y psicológico durante seis meses, entre 1982 y 1983, en una base militar.
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