"Hemos tomado medidas a lo largo de los diálogos para asegurar que los datos confidenciales y discusiones se mantengan a puertas cerradas", ha declarado Jeffrey Rathke, director de la oficina de prensa del Departamento de Estado de EE.UU.
El Gobierno de Estados Unidos, agrega Rathke, estaba al tanto de las investigaciones abiertas por Suiza y Austria y que Washington tenía "estrechas relaciones de trabajo" tanto con Irán como con Israel.
El pasado 24 de marzo, fuentes estadounidenses desvelaron que el régimen de Israel espiaba los diálogos nucleares Irán-Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) que se desarrollaban a puertas cerradas para obtener datos precisos de las conversaciones e impedir el logro de un eventual acuerdo final.
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