El tiempo corre y siguen sin aclararse las incógnitas sobre el Brexit. El líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn, ha aceptado el reto del premier Boris Johnson de celebrar elecciones anticipadas, aunque sólo cuando se descarte la posibilidad de una salida sin acuerdo.
Johnson insiste en salir de la Unión Europea (UE) el 31 de octubre, con o sin acuerdo, y está resistiendo las presiones para pedir una prórroga a Bruselas. Para poder llevar a cabo sus planes de Brexit, necesita una mayoría parlamentaria, y por eso pide elecciones.
Corbyn, por su parte, promete que de llegar al poder, negociará un nuevo pacto de retirada con Bruselas y lo someterá a un referéndum con la opción de permanecer en el bloque.
Europa mantiene que todo es una crisis interna británica. La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró que continúan las preparaciones para un Brexit caótico.
En su intento por reunir apoyos, Johnson se ha reunido con el premier de Irlanda, Leo Varadkar. Ambos creen que hay una vía para un posible pacto sobre el Brexit. Sin embargo, el tiempo apremia y Londres y Bruselas siguen sin ponerse de acuerdo.
Si no hay un avance de último minuto y Johnson opta por un divorcio caótico, se arriesga a violar una ley que se lo prohíbe y enfrentarse a la Justicia británica.
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