Buque de EEUU en China ‘cuestiona excesivos reclamos marítimos’

El objetivo de la llegada de fuerzas navales a aguas chinas no es interferir en las cuestiones vinculadas a la "disputa territorial" sobre el mar de China Meridional, sino Estados Unidos busca cuestionar los “excesivos reclamos marítimos” de Pekín, ha subrayado el vicealmirante de la Marina de Estados Unidos, Joseph Aucoin.

El USS Blue Ridge, que ha realizado este año recorridos de patrullaje en el océano Pacífico, ha arribado al puerto chino una semana después de que Pekín negara la entrada al puerto de Hong Kong a un grupo de embarcaciones estadounidenses, incluido el portaaviones USS John C. Stennis.

Aucoin se ha referido a la medida de Pekín como un “obstáculo menor” y ha explicado a los periodistas que “la relación entre ambos países (China-EE.UU.) es tan importante” que el rechazo a entrar a Hong Kong no la perturba.

Sobre los supuestos motivos de la decisión china respecto al portaaviones USS John C. Stennis, Aucoin ha dicho que no puede teorizar sobre los motivos de China, sin embargo, ha asegurado que las relaciones navales entre los dos Estados “están avanzado”.

Por ejemplo, ha mencionado el militar, China tiene previsto unirse a las maniobras navales, llamadas RIMPAC (Ejercicios Cuenca del Pacífico), organizadas por EE.UU. y a desarrollarse los próximos junio y julio cerca de la isla de Hawái.

China y EE.UU. viven tensas relaciones por diferendos territoriales en las aguas del mar de la China Meridional.

Pekín reclama casi un 90 % de los territorios disputados en el mar de la China Meridional, y en especial la soberanía de las islas Spratly (llamadas Nansha por China) —una zona cuya soberanía o parte de ella reivindican también Filipinas, Vietnam, Taiwán, Malasia y Brunéi—.

En esta disputa se han implicado asimismo potencias extrarregionales, principalmente EE.UU., que apoya a los rivales de China en un intento de contrarrestar el aumento de la influencia de China en la región.

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