El Escuadrón de Acción Rápida ha conseguido confiscar unos 150 kilos de explosivos y materiales empleados en la fabricación de bombas caseras en el primer piso de un edificio de cinco plantas.
De acuerdo con la información emitida por las autoridades, el material confiscado era suficiente para fabricar más de 2000 bombas.
"Conseguimos información de estos milicianos de los que arrestamos anteriormente", ha informado el teniente coronel, Miftah Uddin, ante la prensa.
No es la primera vez que el Ejército bangladesí detiene a elementos de grupos terroristas en su país: el pasado 22 de febrero cinco personas fueron arrestadas en un campamento a las afueras de Chittagong, donde se encontraron armas, munición y material de entrenamiento.
El pasado 19 de enero, la Policía bangladesí capturó en la ciudad capitalina de Daca a cuatro sospechosos de haberse unido al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
Desde el pasado 10 de junio, los terroristas del EIIL, respaldado por algunos países occidentales y regionales, están cometiendo crímenes de lesa humanidad tanto en Siria como en Irak, entre ellos, ejecuciones sumarias y secuestros masivos.
Los líderes del EIIL están intentando reclutar a jóvenes extranjeros para llevar a cabo ataques suicidas.
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