• El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Zeid Raad al-Husein.
Publicada: miércoles, 30 de agosto de 2017 15:38
Actualizada: miércoles, 30 de agosto de 2017 16:22

El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) afirma que la democracia en Venezuela ‘apenas está viva, si todavía está viva’.

Zeid Raad al-Husein ha hecho esta advertencia este miércoles, al presentar un informe que acusa al Gobierno venezolano de "reprimir el disenso político e infundir temor en la población".

El funcionario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha reconocido que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, "fue elegido por la gente", sin embargo, ha dicho que las acciones del mandatario dan "la sensación que lo que quedaba de vida democrática en Venezuela está siendo aplastado".

"Creo que podemos argumentar que con el paso del tiempo hemos visto una erosión de la vida democrática en Venezuela (...) Apenas sigue viva", ha sentenciado el diplomático jordano en declaraciones a los medios de comunicación desde la sede de la ONU en Ginebra.

Creo que podemos argumentar que con el paso del tiempo hemos visto una erosión de la vida democrática en Venezuela (...) Apenas sigue viva", sentencia el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al-Husein.

 

Este informe más en concreto se refiere así a las protestas antigubernamentales, en las que se han sido registrados 1958 casos de lesiones y 124 muertes entre el 1 de abril y el 31 de julio, según el Ministerio Público venezolano, citado en el documento. 

El lunes, el embajador venezolano ante la ONU, Rafael Ramírez, defendió que Venezuela, en la evaluación de la situación de los derechos humanos, ha salido “mucho mejor” que otros países que “nos critican”, en referencia a Colombia, México y Estados Unidos. Asimismo expresó su confianza en que las instituciones venezolanas puedan corregir cualquier desviación o exceso que se produzca.

En cualquier caso, el Gobierno de Venezuela afirma que la agitada situación en Venezuela es producto de la arremetida imperial, secundada por la dirigencia opositora nacional, para acelerar los planes de golpe de Estado continuado que busca acabar con la Revolución Bolivariana, desde su inicio hace 18 años.

aaf/ncl/tmv/tas