"La Secretaría General de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) rechaza la decisión de prorrogar por un año la vigencia del Decreto Ejecutivo del Gobierno de los Estados Unidos de América, aprobado el 9 de marzo de 2015 sobre Venezuela porque, tal como fuera señalado por el Consejo de Cancilleres de la unión el 14 de marzo de 2015, (...) constituye una amenaza injerencista a la soberanía y al principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados", argumentó el organismo regional mediante un comunicado emitido el domingo.
Previamente, la Unasur tachó de decepcionante” la prórroga que Obama había implementado el jueves pasado de la declaratoria de "emergencia nacional" sobre Venezuela que había ordenado el año pasado, cuando consideró a Caracas como “amenaza inusual y extraordinaria” para la seguridad de Washington.
La Secretaría General de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) rechaza la decisión de prorrogar por un año la vigencia del Decreto Ejecutivo del Gobierno de los Estados Unidos de América, aprobado el 9 de marzo de 2015 sobre Venezuela porque, tal como fuera señalado por el Consejo de Cancilleres de la unión el 14 de marzo de 2015, "(...) constituye una amenaza injerencista a la soberanía y al principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados", argumentó la Unasur
La Secretaría General de la Unasur, con sede permanente en Quito (capital de Ecuador), también condenó la mencionada medida norteamericana por desconocer la “institucionalidad democrática” del país bolivariano.
Aludiendo a la reafirmación de la democracia producida en Venezuela durante las elecciones generales del pasado 6 de diciembre, la Unasur arremetió contra la prórroga del decreto de EE.UU., puesto que el mismo bloque sudamericano acompañó dichos comicios.
En consecuencia, prosigue el texto, la Unasur reitera el llamado que ha venido haciendo para el establecimiento de un diálogo institucional en Venezuela que permita a las y los venezolanos conciliar y superar sus diferencias sin ningún tipo de intervención ni presión foránea.
El decreto de la Casa Blanca, que provocó el año pasado una campaña internacional de firmas en la red social Twitter para exigir su derogación, ha despertado la indignación no solo en el Ejecutivo de Venezuela y sino también en otros países vecinos, entre ellos Cuba, Ecuador, Bolivia y Nicaragua.
En reiteradas ocasiones, Caracas ha denunciado la intervención de Estados Unidos en sus asuntos internos, así como su apoyo a la oposición venezolana que ha generado multiples actos desestabilizadores en los recientes años.
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