El comandante de la llamada “brigada de Al-Furqan” del ELS, identificado como Yamal Abás, fue liquidado el sábado mientras patrullaba cerca de la ciudad de Kafr Shams, en el norte de Daraa, según los activistas opositores, citados por medios locales.
Abás, su hermano y otros cuatro combatientes del Ejército Libre Sirio fueron alcanzados por un misil antitanque disparado por las fuerzas del Ejército sirio, añaden los activistas.
El Ejército sirio ha reforzado su actividad a lo largo de las carreteras en Daraa con el fin de detener los movimientos de los terroristas cerca de las fronteras de Jordania.
El ELS goza del apoyo de muchos países occidentales y regionales para derrocar al Gobierno legítimo de Bashar al-Asad. Turquía es uno de los que no escatima ningún esfuerzo para influir en las ecuaciones del país árabe.
Además de ayudar a los armados de ELS, considerados como terroristas por Damasco, Ankara trata de evitar la expansión de la influencia de las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo) y sus aliados en el norte de Siria.
Turquía teme que el fortalecimiento de las YPG en el norte de Siria dé ánimo a su propia insurgencia kurda (Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK), a la que combate desde hace décadas en el sureste de Turquía.
Turquía incluso desplegó fuerzas militares en el territorio sirio para impulsar su estrategia. Turquía llevó a cabo en el norte de Siria la operación militar Escudo del Éufrates so pretexto de luchar contra EIIL (Daesh, en árabe).
A su vez, Damasco repite que las actividades militares de Turquía en su territorio fueron una flagrante violación de su soberanía nacional.
El Consejo Nacional de Seguridad de Turquía anunció el 29 de marzo que ha concluido con ‘éxito’ su operación militar en el norte de Siria.
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