El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha llamado al encargado de negocios saudí, Ahmed al-Muwallid, en ausencia del embajador de Arabia Saudí para transmitirle su malestar sobre las ejecuciones llevadas a cabo en la ciudad de Dammam, capital de la Provincia Oriental (Al-Sharqiya, en árabe).
Los países que se abstienen de ejecutar este tipo de sentencias, de verdad, respetan los lazos bilaterales y tienen en cuenta que la aplicación de tales sentencias no tendrá un efecto positivo en las relaciones", según el vicecanciller iraní, Hasan Qashqavi.
Hasan Qashqavi, el vicecanciller iraní para Asuntos Consulares, Parlamentarios y Migratorios, ha lamentado que desafortunadamente, el Gobierno de Arabia Saudí no respetó las relaciones bilaterales mediante la aplicación de la pena de muerte contra tres ciudadanos iraníes.
“Los países que se abstienen de ejecutar este tipo de sentencias, de verdad, respetan los lazos bilaterales y tienen en cuenta que la aplicación de tales sentencias no tendrá un efecto positivo en las relaciones”, ha indicado Qashqavi.
El diplomático iraní ha añadido que también hay ciudadanos extranjeros condenados a muerte en Irán, pero la aplicación de las sentencias se ha impedido debido a algunos inconvenientes.
Qashqavi también ha sostenido que los tres iraníes ejecutados no tuvieron abogados por eso Teherán tomaría acciones diplomáticas proporcionales para seguir estas sentencias.

Las autoridades saudíes han decapitado este domingo con golpes de espada a tres ciudadanos iraníes después de ser declarados culpables por supuesto contrabando de drogas al reino por vía marítima.
El septiembre de 2014, Al Saud también decapitó con sable a un ciudadano iraní en virtud de una condena a muerte por tráfico de drogas al reino.
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