La Cancillería iraní comunicó que la dimisión de Hariri es un nuevo escenario para crear tensiones en El Líbano y la región. Advirtió de que esta situación solo beneficiará al régimen de Israel, cuya pervivencia depende de crear discordia entre los países musulmanes.
Para Teherán, este es un plan orquestado por EE.UU., el régimen de Israel y Arabia Saudí. También declaró que la lucha contra la inseguridad y la inestabilidad son las principales políticas de Irán, país que respeta la independencia y estabilidad libanesa.
El analista internacional Iñaki Gil de San Vicente aborda el tema desde el País Vasco (España) en una entrevista con HispanTV.
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