La deuda pública de Panamá casi duplica los 26 612 millones de dólares con que la actual administración asumió en 2019 y hay quienes manifiestan preocupación de que el dinero proveniente de préstamos y la emisión de bonos estén yendo a cubrir el presupuesto estatal y los propios intereses de la deuda.
Tras la última colocación de Bonos Globales en el mercado internacional por unos 3100 millones de dólares en febrero pasado, la deuda pública de Panamá ha superado los $50 mil millones.
Entre las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) se encuentra la aplicación de medidas paramétricas para quienes opten por una jubilación o una reforma fiscal que incremente la recaudación de impuestos.
Una buena administración de los fondos implicaría acciones contra la evasión fiscal y de las cuotas obrero patronales a la Caja de Seguro Social que junto con el impacto de la corrupción en el Producto Interno Bruto (PIB) le están quitando más de 13 mil millones de dólares al desarrollo del país.
Sobre un nuevo gobierno, tras las elecciones de mayo próximo, recaerá la tarea de enfrentar una deuda que sigue aumentando y no para el beneficio de los panameños.
John Alonso, Ciudad de Panamá
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