Ante el poderío militar del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), que constituye una “amenaza” para el régimen de Tel Aviv, las fuerzas de la unidad 914 de la marina israelí patrullan las costas norteñas y realizan maniobras semanales conjuntas con el ejército israelí, según publicó el lunes Ynet.
Simultáneamente, añade la fuente, el ejército israelí ha implementado un sistema de sensores en la zona para avisar cualquier intento de “violar" sus fronteras marítimas.
Los soldados del Ejército libanés están desplegados en los puestos fronterizos frente a nosotros, pero Hezbolá también tiene combatientes en esa zona. Por eso estamos armados y preparados”, indicó el teniente general israelí, Ronen Mirkam.
Estas medidas forman parte de los actos preparativos ante lanzamiento de misiles antitanques y proyectiles de cohetes desde las costas libanesas hacia la marina israelí, que según el teniente general Ronen Mirkam podría tener lugar en cualquier momento, incluso, añadió, antes de una advertencia desde la inteligencia israelí.
“Los soldados del Ejército libanés están desplegados en los puestos fronterizos frente a nosotros, pero Hezbolá también tiene combatientes en esa zona. Por eso estamos armados y preparados”, indicó Mirkam, quien junto al teniente general Adi Ganon participaba en la patrulla.
Al señalar los buques libaneses que cruzaba unos cientos de metros de las fuerzas israelíes, el alto mando castrense israelí destacó que esos navíos podrán llegar a las costas de la Palestina ocupada en cuestión de segundos.
Funcionarios de la inteligencia israelí han advertido en varias ocasiones de que Hezbolá podría sorprender a Israel con un ataque masivo en represalia por los crímenes cometidos por dicho régimen contra los pueblos de Palestina y El Líbano.
Según los diarios israelíes, el régimen de Israel ya ha empezado a realizar maniobras de "ataque masivo" ante un eventual conflicto militar con Hezbolá y el Movimiento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS).
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