“Ante su injerencista, atrevido e insolente comunicado [...], la República de Nicaragua [...] ha decidido suspender el plácet que había concedido al señor Fernando Ponz, como embajador de esa potencia avasalladora”, ha firmado este martes el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, en una carta dirigida a la UE.
Moncada ha explicado que ante el “permanente asedio” al derecho del pueblo nicaragüense a la soberanía nacional, Managua rechaza recibir al representante de Bruselas.
“Reiteramos a los señores neocolonialistas de la Unión Europea, nuestra condena a todo su genocidio histórico, y exigimos justicia y reparación frente a esos crímenes de lesa humanidad y a su virulento, codicioso y rapaz saqueo de nuestras riquezas y culturas propias”, ha agregado.
Las relaciones entre Nicaragua y la Unión Europea empeoraron significativamente en el año pasado. El 28 de septiembre pasado, el Gobierno de Managua declaró persona no grata a la representante de la UE en Managua, Bettina Muscheidt. Por otra parte, el Consejo de la UE adoptó una medida similar contra la representante de Nicaragua ante el bloque, Zoila Muller Goff.
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