• Fuerzas del Ejército iraquí.
Publicada: jueves, 30 de junio de 2016 17:24
Actualizada: lunes, 24 de julio de 2017 7:02

El Ejército iraquí, apoyado por las fuerzas populares, ha liberado más localidades en el oeste y norte del país, que habían caído en manos de Daesh.

Fuentes locales de seguridad han informado este jueves que las fuerzas iraquíes han arrebatado al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) los distritos de Albu Ifan y al-Dhaviyah, que se encuentran al sur de la recién liberada ciudad de Faluya, en la provincia occidental de Al-Anbar.

Rayi al-Isawi, un miembro del Comité de Seguridad de Irak, ha explicado que el control de ambos distritos han sido recuperados sin disparar ni una sola bala, pues, añade, los extremistas takfiríes habían huido de la zona antes que se iniciara la operación.

El funcionario árabe ha comentado que esta victoria marca la derrota completa de esta banda armada en los suburbios sureños de Faluya.

El teniente general Ismail al-Mahlawi, responsable de las operaciones en Al-Anbar, por su parte, ha anunciado la expulsión de los integrantes de Daesh de la localidad de Hossa, ubicada también en los suburbios de Faluya.

Según Al-Mahlawi, los combatientes tribales iraquíes han contribuido mucho a la operación para recuperar Hossa, donde han ocasionado grandes pérdidas materiales y personales en las filas terroristas.

Un tanque del Ejército iraquí en las calles de la devastada ciudad de Faluya, en la provincia de Al-Anbar (oeste de Irak), 26 de junio de 2016.

 

En el norte de Irak, las fuerzas leales al Gobierno de Bagdad además han liberado la misma jornada del jueves dos aldeas en el distrito de Majmur, ubicado a unos 55 kilómetros al sur de Mosul, capital de Nínive, principal bastión takfirí en el norte del país.

El Ejército iraquí, en un comunicado, ha señalado que durante esta operación han destruido también cuatro vehículos de Daesh cargados de explosivos.

Después de la recuperación de Daesh de la estratégica Faluya, las fuerzas iraquíes han comenzado nuevas ofensivas para expulsar a los terroristas de otras partes del país, incluida Mosul y la provincia de Salah al-Din.

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