El Tribunal Constitucional (TC) ha barrado el paso a la posibilidad de investidura a distancia de Puigdemont. El Gobierno de Mariano Rajoy en consejo de ministros extraordinario ha recurrido la medida y ha frenado la vía del expresidente catalán para repetir en el cargo.
Esto en plena pugna con Ciudadanos para ver quién es más contundente contra el separatismo. La formación de Albert Rivera ha dado por roto su apoyo a Rajoy por mantener el voto delegado de Puigdemont y Comín.
El ejecutivo estatal ha avisado al presidente del Parlamento de Cataluña, Roger Torrent, de incurrir en desobediencia si convoca el pleno para nombrar Puigdemont, mientras éste en el Día de Europa y ante el cuerpo consular en Barcelona ha enfatizado los valores democráticos del pueblo catalán ante la actual represión del Estado.
A pesar de la impugnación, Junts per Catalunya (JuntsxCat) ha mantenido como candidato a Puigdemont sin desvelar aún su alternativa para retomar las riendas de la Generalitat.
La Candidaturas de Unidad Popular (CUP) ha ratificado su abstención a cualquier nombre que no despliegue la República y la Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), proclive a un plan D para evitar elecciones; espera que el expresidente desde Berlín, capital de Alemania, designe sucesor cuanto antes.
Por su parte, el partido de extrema derecha VOX, que lleva la acusación popular en el caso de los políticos catalanes encarcelados, ha pedido la detención inmediata de Roger Torrent por prevaricación y desobediencia, mientras los que siguen en prisión han vuelto a pedir ante el juez su liberación y el juez Pablo Llarena se la ha denegado y ha confirmado su procesamiento por rebelión.
Oriol Puig, Barcelona.
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