Si algo sabe hacer el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, es jugar al desgaste y a eso se dedica en estas negociaciones. Desgastar el ‘No’ del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) hasta convertirlo en un ‘sí’ o al menos en un ‘tal vez’
El Partido Popular (PP) se reunía en pleno para dar luz verde a la negociación con Ciudadanos pero desde la entrada sus dirigentes ya mandaban mensajes al PSOE.
El Comité Ejecutivo Nacional (ANP) ha estado dos horas reunido para permitir que Rajoy negocie con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, pero nada han dicho de los seis puntos que exigía Ciudadanos sobre regeneración política, ni nada ha dicho sobre la fecha de investidura. Solo ha dado un giro de tuerca más contra el PSOE.
A todo esto el PSOE contraprogramaba la junta del PP con una reunión de su comité federal. Después de dos semanas reaparecía Pedro Sánchez para reiterar su rechazo al PP y asegurar que Rajoy mantiene cautivo a la democracia.
Rajoy sigue apostando por conseguir la presidencia presionando aún más al PSOE y a Pedro Sánchez. No desvela una fecha de investidura, ni posibles concesiones a partidos como Ciudadanos o al PSOE. Apela a la responsabilidad de Estado del resto de partidos políticos y asegura que a España le puede pasar factura no tener un Gobierno durante tanto tiempo.
Rafael González, Madrid.
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