Estas averiguaciones se han hecho gracias a la detención, el pasado viernes en Tánger (en el extremo norte de Marruecos), de un grupo de terroristas que según ha indicado este miércoles el diario electrónico español La Información, planeaban atentar en varios lugares e instaurar el ‘califato’ en el este marroquí.
De acuerdo con la información que ha podido obtener el diario, que ha consultado con fuentes marroquíes, los terroristas, por primera vez, no tenían por objetivo una mera idea vaga. Tenían ya la estructura del futuro califato “perfectamente definida” y un plan minuciosamente trazado, en el que se incluía el establecimiento de su principal urbe a tan solo 153 kilómetros de Melilla.

El grupo takfirí estaba dirigido por un ciudadano de Chad, miembro de Daesh, que llegó a Marruecos este mes con el objetivo de entrenar y liderar una célula terrorista formada por argelinos y marroquíes. Esta llevaría a cabo varios atentados simultáneos en Marruecos, además de reclutar a nuevos combatientes para trasladarlos a campos de entrenamiento terrorista en Libia.
El comando pretendía atacar las principales embajadas de Rabat —estaban especialmente interesados en las de Estados Unidos y España—, y tenían planos de las principales ciudades de Marruecos.
El número de víctimas que podrían haber causado sus ataques, afirman fuentes de la investigación oficial marroquí, podría haber superado, con toda probabilidad, al de los atentados de París (Francia) y Bruselas (Bélgica), vista la cantidad de material explosivo y distintas armas que los terroristas llevaban consigo.
Desde hace tiempo, la cifra de extranjeros que engrosan las filas del grupo takfirí ha ido en aumento y en Melilla ya se ha detectado la presencia de simpatizantes de la banda terrorista. No bastando con eso, España también parece estar en el punto de mira de la agrupación terrorista de Al-Qaeda, que junto a Daesh ya ha amenazado en varias ocasiones con realizar atentados en su territorio.
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