“Hezbolá defendió El Líbano ante EIIL cuando el Gobierno y el Ejército no habían tratado bien este caso”, ha dicho este viernes Gebran Bassil durante su visita oficial a Moscú (la capital rusa).
La declaración de Bassil a favor de Hezbolá llega en un momento en el que el primer ministro libanés, Saad Hariri, criticó duramente al Movimiento desde Riad (la capital saudí). Hariri se encuentra en Arabia Saudí desde donde anunció sorpresivamente su renuncia al cargo el pasado 4 de noviembre y sin aclarar los motivos de su estancia en el país árabe, razón por la que las autoridades de Beirut acusan a los saudíes de haberlo retenido.
De acuerdo con la cadena Al-Manar, el jefe de la Diplomacia libanesa ha tachado de “inválidos” los argumentos de Hariri y ha subrayado que Beirut mantendrá sus relaciones con Hezbolá y Siria. “Hariri sabía que El Líbano no tiene la intención de cortar relaciones con Siria”, ha añadido.
En concreto, Bassil se ha referido a los alegatos sin fundamentos de Hariri contra Hezbolá y ha recordado que de no haber sido por Hezbolá, El Líbano no habría derrotado a Daesh.
Hezbolá defendió El Líbano ante ISIS (acrónimo inglés de Daesh) cuando el Gobierno y el Ejército no habían tratado bien este caso”, dice el canciller libanés, Gebran Bassil.
Tras hacer hincapié en que la renuncia de Hariri forma parte de un “intento para crear caos en la región”, Bassil ha advertido de que El Líbano tiene “plenos poderes” para reaccionar ante las amenazas.
De acuerdo con los analistas, los funcionarios saudíes han dado a Hariri dos opciones: la primera, regresar a Beirut (capital libanesa) y tomar una postura agresiva contra Hezbolá y, la segunda, que se exilie en Europa y deje de lado la política para siempre.
Varios informes también aseguran que los saudíes tratan de designar a su hermano Bahaa Hariri en lugar de Saad como líder del Movimiento (político) del Futuro y el nuevo “hombre de Arabia Saudí” en El Líbano.
alg/ncl/tmv/hnb
