"Hay personas que quieren desatar una guerra entre razas y si no somos cautos, podemos hundirnos en ella", advirtió la expresidenta de una ramas de la Asociación Nacional Para el Avance de la Gente de Color (NAACP), Moneuc Conners, el martes a la agencia AFP.
Conners que asistía a una conferencia de NAACP, en Cincinnati, estado norteño de Ohio, mostró su esperanza de que la candidata demócrata, Hillary Clinton gane la elección presidencial del 8 de noviembre, al considerar que si el aspirante republicano, Donald Trump, llegase a la Casa Blanca sería una catacumba para la defensa de los derechos civiles.
Hay personas que quieren desatar una guerra entre razas y si no somos cautos, podemos hundirnos en ella", advirtió la expresidenta de una rama de la Asociación Nacional Para el Avance de la Gente de Color (NAACP), Moneuc Conners.
Oscar Arrington, un policía negro retirado de Nueva York, quien participaba en el evento, dijo que: "Los caucásicos no son abatidos a balazos como nosotros".
En este sentido, añadió que cada día en EE.UU. va de mal en peor, porque cada vez que ocurre una violencia policial contra las minorías, se dice que ‘’Nunca más’’, pero acto seguido una persona de color desarmada es abatida por los agentes.
El presidente de la NAACP, Cornell William Brooks, quien comparó los actos de violencia mortal cometidos por policías con linchamientos, pidió al próximo presidente que se comprometa abiertamente con la búsqueda de una solución al problema.
Por ello, afirmó que si los candidatos quieren los votos de quienes defienden los derechos civiles de los estadounidenses, deberán comprometerse a buscar alguna solución a esta problemática, antes de asumir su cargo.
La creciente tensión racial se palpa en los EE.UU., y con recientes muertes de los afroamericanos Philando Castile y Alton Sterling, a manos de la policía y el posterior asesinato de cinco agentes policiales blancos durante una protesta contra la brutalidad policial en Dallas, estado de Texas.
krd/ktg/hnb
