Boeing concluyó este acuerdo —que incluye pedidos en firme y opciones de compra— con China Aviation Supplies Holding Company (CASC), compañía que adquiere los aparatos por cuenta de las aerolíneas chinas.
Según ha anunciado en la misma jornada la compañía norteamericana, este gigantesco contrato se ha rubricado en el segundo día de la visita a Pekín del presidente Donald Trump, como parte de su gira por Asia.
Los detalles del acuerdo no fueron divulgados, por lo que se ignora si todos los aparatos corresponden a pedidos nuevos. Boeing no ha respondido por el momento a las peticiones de aclaración.
Incredible day in China. Signed an agreement for 300 airplanes. Strengthens relationship in biggest market. https://t.co/2JKsDUuEDq pic.twitter.com/e8eBtbczkQ
— Boeing Airplanes (@BoeingAirplanes) November 9, 2017
Este anuncio se inscribe en los acuerdos comerciales, de un monto total de más de 250.000 millones de dólares, anunciados tras la reunión en Pekín de Trump y su homólogo chino Xi Jinping.
Boeing ya había recibido en septiembre de 2015 por parte de CASC un pedido histórico de 300 aviones con un precio de catálogo de 38.000 millones de dólares, lo que marca un récord en el mundo de la aeronáutica.
Ese acuerdo, que incluye la compra de 190 aviones del modelo 737 y 50 grandes aparatos de modelos no precisados, había sido anunciado con ocasión de la visita de Estado de Xi a Estados Unidos.
Boeing está determinado a no dejarse adelantar por su rival europeo Airbus en el jugoso mercado chino.
China es el segundo mercado aeronáutico mundial y Boeing considera que el país necesitará 7240 aviones comerciales en los próximos 20 años.
Boeing presentó a finales de septiembre en China su primer centro de acabado de aviones de medio radio B737, que estará operativo el año próximo, con el objetivo de alentar sus ventas en el país.
Airbus es sin embargo el único fabricante que posee una planta de ensamblaje en China, de la que saldrán unos 330 aviones A320 en el plazo de una década.
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