“Arabia Saudí ya ha exhibido todo su poderío militar tanto en Siria como en Yemen. Aun así, ha fracasado en ambos campos (…) Si ellos (los saudíes) fueran capaces, ya habrían enviado tropas al territorio sirio. Así que Riad perderá aun más si quiere aumentar su presencia en Siria”, ha sostenido este domingo el general Masud Yazayeri, subjefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes.
Arabia Saudí ya ha exhibido todo su poderío militar tanto en Siria como en Yemen. Aun así, ha fracasado en ambos campos (…) Si ellos (los saudíes) fueran capaces, ya habrían enviado tropas al territorio sirio. Así que Riad perderá aun más si quiere aumentar su presencia en Siria”, dice el general Masud Yazayeri, subjefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes.
En los últimos días, los principales opositores al Gobierno sirio en la región barajan la posibilidad de enviar fuerzas terrestres a Siria, que según alegan, tendrán como objetivo luchar contra las bandas terroristas que asolan el país desde el inicio del conflicto, en 2011.
A la cabeza de la nueva iniciativa militar se hallan Arabia Saudí y Turquía, que con luz verde de EE. UU. han anunciado su plena disposición para participar cualquier operación terrestre en suelo sirio. Damasco, por su parte, no ve en todo esto más que un pretexto para derrocar al presidente sirio, Bashar al-Asad.
En este sentido, el general Yazayeri ha afirmado que los terroristas takfiríes que operan en Siria en la actualidad son ya fuerzas saudíes o mercenarios secundados por Washington y por varios países reaccionarios más de la región, por lo que “hablar de expedición de tropas de Riad o de otros países no es una novedad”.
“Además, que los terroristas se infiltran a Siria a través de la frontera con Turquía es una realidad sobre la cual no caben dudas”, ha subrayado el alto mando castrense iraní, a cuyo juicio la posible incursión militar al territorio sirio solo “es un farol político y una maniobra de guerra psicológica”.
En todo caso, el general iraní —cuyo país envía asesores militares a Siria a petición de Damasco, con la misión de capacitar al Ejército local para la lucha antiterrorista— ha recalcado que Teherán no permitirá en ningún caso que actores extranjeros impongan en Siria sus políticas malignas.
“No vamos a permitir que la situación en Siria se salga de control, de manera que ciertos Estados delincuentes puedan aplicar sus políticas malintencionadas. Si es necesario, tomaremos las decisiones apropiadas”, ha remarcado al preguntársele si Irán aumentaría el número de sus asesores en Siria para contrarrestar un posible despliegue de fuerzas extranjeras.
Yazayeri ha concluido sus declaraciones reiterando que la República Islámica de Irán brinda su apoyo a las operaciones antiterrorista de Rusia, que favorecen a la nación siria, y que Teherán y Moscú coordinarán su acción política y militar en el país árabe, igual que hasta ahora.
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