Esta información se da a conocer después de que la televisión de Corea del Norte ha mostrado las fotos del líder del país Kim Jong-un, examinando los objetivos militares secretos con misiles, según ha informado este viernes la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
Asimismo, en las imágenes han sido mostrados un cañón autopropulsado con un misil balístico intercontinental Hwasong-14 ensayado el 4 de julio.
El medio ha destacado que estos objetivos subterráneos en Corea del Norte por primera vez fueron mostrados abiertamente.
Es evidente que los misiles están escondidos bajo tierra para evitar ataques selectivos de EE.UU. en caso de acciones militares, dice Yonhap.
Posiblemente, se trate de túneles subterráneos secretos para el movimiento de lanzadores móviles para poder atacar al enemigo desde cualquier punto de Corea del Norte.
El 4 de julio, Pyongyang probó con éxito, y por primera vez, Hwasong-14,, un misil balístico intercontinental capaz de alcanzar “cualquier parte del mundo”, según la televisión estatal norcoreana. El ensayo provocó la ira de países de la región, en particular Corea del Sur y Japón, y de otras zonas, sobre todo de EE.UU. Según el Gobierno de Pyongyang, la escalada nuclear y militar responde a “provocaciones” del vecino sureño y EE.UU.
Con este, se eleva a 10, el número total de ensayos de misiles balísticos, que el país ha realizado en lo que va de año. En 2016, Pyongyang llevó a cabo más de 20 pruebas similares, además de la cuarta y la quinta de tipo nuclear.
De acuerdo con los analistas, la prueba del 4 de julio evidencia que Pyongyang se encuentra cada vez más cerca de su objetivo principal, es decir, hacer frente a todas las amenazas de Washington. De alcanzar su propósito, cambiarían radicalmente las dinámicas diplomáticas y aumentaría la posibilidad de una respuesta contundente de la Administración estadounidense a las pruebas nucleares norcoreanas.
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