“Los guerrilleros han empezado a abandonar las zonas que estaban tradicionalmente bajo su control, pero el Estado no las ha ocupado totalmente, lo que crea un vacío de poder”, ha destacado este viernes la portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ravina Shamdasani.
De igual modo, ha advertido de que dicha situación puede ser aprovechado por los grupos criminales armados para tomar el control de las actividades económicas ilegales en esas zonas, donde se han producido ya 61 asesinatos de defensores de los DD.HH. y dirigentes sociales, un tercio de ellos tras el fin del primer acuerdo de paz FARC-Bogotá a finales de septiembre.
Los guerrilleros han empezado a abandonar las zonas que estaban tradicionalmente bajo su control, pero el Estado no las ha ocupado totalmente, lo que crea un vacío de poder”, ha destacado la portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Ravina Shamdasani.
Mediante dichas palabras, la vocera de la ONU ha aludido al acuerdo de paz que firmaron el pasado 24 de noviembre el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’, que revisaba parte del texto rechazado unas semanas antes en un referéndum.
Según los términos del mencionado acuerdo, con el inicio de la implementación del acuerdo, los guerrilleros deben concentrarse en 27 zonas en el país sudamericano, para luego entregar sus armas progresivamente en un plazo de hasta cinco meses, con vistas en el futuro a formar un partido político.
Shamdasani ha criticado que las FARC ha cumplido su parte y a realizar sus primeras movilizaciones, mientras tanto, ninguna de esas zonas han sido equipadas para recibirlos de forma apropiada, aún dos semanas después del inicio del proceso.
Criticando el acceso limitado al agua potable, la electricidad, la falta de alimentos y de atención sanitaria, la responsable de las Naciones Unidas ha destacado que la experiencia demuestra que primeros días de desmovilización son los más críticos para convencer a los combatientes que no abandonen el proceso de paz.
Por lo tanto, Shamdasani ha urgido “una acción inmediata, determinada y visible” del Gobierno de Santos así como el nombramiento de un responsable con suficientes poderes, para solucionar las cuestiones prácticas, garantizar la seguridad y los servicios básicos, y para observar la aplicación de todos los aspectos del acuerdo.
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