• El expresidente de Colombia Álvaro Uribe.
Publicada: martes, 22 de noviembre de 2016 9:53
Actualizada: martes, 22 de noviembre de 2016 18:41

Los opositores al acuerdo de paz con las FARC, encabezados por el expresidente Álvaro Uribe, rechazaron el nuevo convenio logrado la semana pasada en La Habana.

"Insistimos esta noche en un acuerdo nacional para introducir unas modificaciones al acuerdo ajustado entre el Gobierno y las FARC. El Gobierno ha negado, esta noche, la posibilidad de este acuerdo nacional sobre temas sustanciales", declaró el lunes a periodistas el expresidente de Colombia Álvaro Uribe, férreo opositor a las conversaciones con la guerrilla.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) alcanzaron la semana pasada en La Habana, capital de Cuba, un segundo acuerdo de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos, en el que incluyeron peticiones de la oposición: recordemos que el primer acuerdo fue rechazado en un plebiscito el 2 de octubre.

Insistimos esta noche en un acuerdo nacional para introducir unas modificaciones al acuerdo ajustado entre el Gobierno y las FARC. El Gobierno ha negado, esta noche, la posibilidad de este acuerdo nacional sobre temas sustanciales", declaró el expresidente de Colombia Álvaro Uribe.

Los opositores, no obstante, rechazaron el nuevo pacto, pese a ser revisado por las partes negociadoras, y pidieron una reunión con los representantes de la guerrilla que llegaron el lunes a Bogotá, capital colombiana, procedente de la isla para preparar la firma de la paz.

Uribe, el actual senador por el Centro Democrático se reunió, en compañía de otros voceros del "No" al primer acuerdo de paz, con una delegación del Gobierno de Santos que les explicó el nuevo pacto logrado el pasado 12 de noviembre en La Habana.

Para la oposición, el nuevo pacto de paz "es apenas un retoque del acuerdo rechazado por los ciudadanos", si no incluya algunos de sus pedidos.

Mientras que el gobierno y la guerrilla han coincidido en que sería mejor que el pacto sea refrendado por el Congreso, la oposición considera "fundamental" la refrendación popular de lo pactado o sobre "los puntos referidos de desacuerdo".

 

Tanto el Ejecutivo de Santos como los representantes de las FARC han urgido la necesidad de implementar cuanto antes el nuevo acuerdo de paz por la fragilidad del cese al fuego bilateral vigente desde agosto, que se hizo evidente tras un suceso la semana pasada en el que murieron dos integrantes de la guerrilla en un presunto combate con el Ejército en el norte de Colombia.

El domingo, el líder las FARC, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, dijo que Colombia necesita ese acuerdo para “comenzar a sentar las bases de la reconciliación y la paz” y advirtió que cualquier demora en su implementación favorece a quienes no quieren la paz.

ftm/rha/nal