Los desórdenes se iniciaron el jueves al término de una marcha realizada en rechazo a la Ley Antiterrorista y en apoyo a los cuatro comuneros que llevan más de 90 días en huelga de hambre.
Los policías mientras reprimían a los manifestantes con gases lacrimógenos y cañones de agua, introducían en los vehículos blindados a los detenidos (11 mujeres y 5 hombres).
Los mapuches organizaron esta manifestación bajo el lema de ‘Respeto, Salud y Dignidad’ en solidaridad con los cuatro presos mapuches acusados presuntamente de haber atacado una iglesia evangélica en 2016.
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