El repudio a la figura del mandatario de Brasil ha crecido en 18 puntos porcentuales desde octubre pasado a la fecha, según reveló el viernes Ipsos, publicando los resultados de su encuesta.
La gestión de Temer al frente del Gobierno de Brasil sufrió también un aumento en las calificaciones negativas al elevarse del 52 al 62 por ciento el número de quienes la consideran mala o pésima.
Además, la aprobación del jefe de Estado brasileño osciló un punto hacia abajo y actualmente se sitúa en un 15 por ciento; mientras tanto, los que valoran su administración como óptima pasaron del siete al ocho por ciento.
Tal y como explicó el director de Ipsos, Danilo Cersosimo, el aumento de la desaprobación de Temer se debe al conjunto de tres factores: lo primero es la insatisfacción del pueblo brasileño por la falta de una reacción adecuada de Brasilia a la aguda crisis económica que azota el país.
“La segunda causa está relacionada con la agenda de reformas propuesta por Temer y vista como impopular por la mayoría de los entrevistados”, aseveró Cersosimo, al indicar que el 87 por ciento de los participantes considera que el país está en un camino equivocado.
El tercer y también el más relevante, a su juicio, está vinculado con las acusaciones hechas en contra de su persona y sus principales aliados en el marco de la operación anticorrupción Lava Jato.
Otra encuesta realizada por el Instituto Brasileño de Opinión (Ibope), divulgada la semana pasada, reveló que el 72 por ciento de los brasileños no confía en el jefe del Gobierno, frente al 68 por ciento registrado en una medición del pasado octubre.
El Gobierno brasileño vive momentos difíciles al enfrentar masivas protestas que acusan a Temer de ser un ‘golpista’ por propiciar el juicio político contra la expresidenta Dilma Rousseff.
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